Si has tenido todo el invierno la piscina sin hacerle un mantenimiento mínimo, ahora, que llega el verano, tendrás que hacerle una limpieza a fondo, empezando por el vaciado total de la misma, limpiar el fondo y las paredes con productos desinfectantes pero que no dañen el material del que esté hecha la piscina y limpiar muy bien el sistema de filtrado. Una vez hayas hecho esto se procede al llenado. Tendrás que regular el pH y añadir cloro de disolución rápida.
Si has hecho lo que se llama el invernaje, que consiste en mantener la piscina con un mantenimiento mínimo durante el invierno, tendrás que poner varios productos para poner a punto el agua, tales como antialgas, floculantes que eliminen la suciedad residual del agua, regular el pH y cloro de disolución rápida. Mide también el nivel de sal y pon en marcha la depuradora unas 12 horas ininterrumpidas antes de proceder al baño.