Cada Navidad sucede lo mismo, un mes de estresantes preparativos, un árbol llenos de regalos y una buena temporada escuchando “me lo pido” en boca de los más pequeños.
¿Nos hemos vuelto locos?
Quizás un poco. Lo que verdaderamente importa lo dejamos a un lado para sustituirlo por regalos para demostrar lo que nos queremos. ¿Qué tal si lo decimos y después abrazamos a nuestros seres queridos? ¿Qué tal si sustituimos el consumismo por un ratito al lado de quienes nos importan? ¿Qué os parece si la Navidad la vivimos todos los días sin necesidad de consumir? Porque al final solo rellenamos sentimientos de culpabilidad con regalos, cuando lo que se espera de nosotros es cariño y atención.
Feliz Navidad a todos.
La otra carta – de IKEA
Si te ha gustado este post y quieres leer más artículos tan interesantes como éste síguenos en nuestra página de Facebook, Google+, Twitter o nuestro canal de Youtube.
Eva Irene B. G. / Redacción
Desatascos Cubacas