El sifón es una curvatura en la tubería que habitualmente se ubica en el inicio del desagüe de cualquier lugar dónde se deba desalojar agua de la casa, por ejemplo, en el fregadero, en la ducha, lavabos y váter. El sifón, comúnmente llamado codo, hay que limpiarlo de manera periódica para evitar que el agua y desechos desaguados retornen. Esto hay que tenerlo muy en cuenta ya que ayuda, y mucho, a alargar la vida de las tuberías y a evitar los malos olores que pueden aparecer.
Para comenzar, lo que tenemos que saber es cual es la función exacta del codo y qué tipo de instalación tenemos.
En este post nos vamos a centrar en el bote sifónico ubicado bajo el fregadero de la cocina. Podemos encontrar de uno o dos senos, dependiendo de si el fregadero consta con una o dos picas. Podemos encontrarnos también con que el sifón se encuentra muy cerca de la salida de la tubería del desagüe de la lavadora y/o lavavajillas, expulsando el agua residual todos a una misma tubería.
Una vez tenido en cuenta todos estos aspectos, procede a despejar todo lo que te obstaculice de alguna manera e impida que puedas trabajar lo más cómodo posible. Una vez todo despejado, ya estás listo para comenzar con el mantenimiento y limpieza del sifón del fregadero.
Sigue estos sencillos pasos para una limpieza correcta:
Busca un cubo y ponlo debajo de la tubería para evitar cualquier derrame de agua y residuos.
Si el codo de la tubería tiene tapón, deberías desenroscarlo dejar salir todos los desechos ahí estancados. Si el desagüe va conectado a algún electrodoméstico, también tienes que desenroscarlo y aflojar las tomas.
Ten en cuenta que el principal objetivo que tenemos es poder limpiar las piezas de la mejor forma posible, por lo que tienen que estar considerablemente separadas. Es recomendable que sumerjas cada una de estas piezas en agua caliente y diluyas algún tipo de desengrasante en el agua. Puedes echar mano de los desengrasantes naturales que alguna vez te hemos nombrado en el blog desatascos Cubacas para el mantenimiento de tuberías y limpieza del hogar. Deja las piezas un rato a remojo, y posteriormente, después de unos 30 minutos, frota con el estropajo para retirar todos los residuos.
Tienes que tener en cuenta que si estás intentando solucionar un atasco, este es el primer paso a seguir. Sin embargo, si cuando has quitado el sifón no había nada atascado y el atasco persiste, el problema se encontrará probablemente dentro de la tubería y deberás utilizar un desatascador de muelle para poder introducirlo en la tubería. Ten mucho cuidado con este tipo de desatascadores, ya que su mal uso puede estropear el desagüe. Si no estás muy seguro de utilizarlo correctamente en un desatasco, llama a profesionales como Desatascos Cubacas.
Cuando te hayas asegurado de que has extraído toda la suciedad y el sifón está limpio, ya puedes volver a montarlo todo sin ningún tipo de problema.
Siguiendo estos pasos estarás cuidando tu tubería y alargando, pues, su vida útil, evitando que los residuos se vayan almacenando poco a poco en el sifón. Con una correcta limpieza periódica los residuos no rebosarán ni traspasarán el umbral del bote sifónico, evitando así trabajos de desatascos complicados.
Si ha habido alguna situación donde has tenido que recurrir a profesionales de los desatascos cuéntanoslo. ¿Cuánto tiempo tardaron en solucionarlo? ¿Previamente limpiaste el bote sifónico? ¿Estuviste contento con el servicio? No seas tímido, deja un comentario o habla de tu experiencia en nuestras redes sociales.
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Marian Guinot y Eva I.B.G. / Redacción
Desatascos Cubacas